Comparsa juvenil, el viejo organillo - final

Bichos con mucho ritmo

La comparsa ‘El viejo organillo’ se presenta como un grupo de bichos, (como el de la película “Bichos” de Disney) que sale a cantar de un viejo organillo abandonado a ritmo de jazz.   Los pasodobles, el primero dedicado a Antonio Martín que introducen con uno de la letra de uno de sus pasodobles. Ellos hablan de “esa rosa” que enamoró al coplero. Dicen que desde ese momento en que la “rosa” se encontró con Martín las coplas llevan todas su aroma. El segundo a la cantera del Carnaval. Ellos hablan del esfuerzo que hacen muchos jóvenes para salir en la Fiesta pero que no cuentan con copleros que les ayuden. Dicen que así lo único que se consigue es “matar” a la cantera, que irá desapareciendo.   Los cuplés, en el primero cuentan que National Geographic va a grabarles “y se lo pusieron muy fácil”. Pero las moscas no paraban de volar, “porque eran de Sevilla, que son moscas cojonera”. En el segundo cuentan que ellos han nacido para cantar, no para trabajar. En verano ellos montan un chiringuito al lado del mar, pero este año no lo montarán, porque si va el Selu no va sitio ni para poner la toalla.   El popurrí de estos bichos, siguiendo el ritmo de jazz, pero con letras dedicadas al amor, a Cádiz y a esta Fiesta. Sueñan bajo el sol de Cádiz, y cantando a la claridad de esta ciudad.