Chirigota, la última y nos vamos - preliminar

Un juego de niños desde chipiona

Después de faltar a las tablas tres años, vuelve la chirigota del Kisky al Falla. En 2013 llegó a cuartos con 'Los que no se jartan de choppe'. En 2014 y 2015 también pisaron las tablas con 'El tipo está en el aire' y' Los que cambian de tema'. En esta ocasión defienden 'La última y nos vamos', una apuesta que habla de niños que se montan en cacharritos de feria y no se quieren bajar. Van con sus padres que están hartos de esperar.  El primer pasodoble al drama de las separaciones. En la segunda letra hablan de que la situación en el Gobierno andaluz es "vergonzosa".  En cuanto a los cuplés, juegan con la dualidad del padre y los niños. en el primero piden un huevo Kinder y después dicen que van a jugar "con lo que le salga de los huevos". En el segundo dicen que los niños han pillado a los padres y remata con ironía sobre el tamaño del "tiburón" del padre. "Tenemos un truquito que da resultado. Lloramos, lloramos, lloramos. La última y nos vamos", reza el estribillo.  Popurrí al tipo con guiños constantes a esa dualidad entre el padre y el hijo. 

Un juego de niños desde chipiona

Después de faltar a las tablas tres años, vuelve la chirigota del Kisky al Falla. En 2013 llegó a cuartos con 'Los que no se jartan de choppe'. En 2014 y 2015 también pisaron las tablas con 'El tipo está en el aire' y' Los que cambian de tema'. En esta ocasión defienden 'La última y nos vamos', una apuesta que habla de niños que se montan en cacharritos de feria y no se quieren bajar. Van con sus padres que están hartos de esperar.  El primer pasodoble al drama de las separaciones. En la segunda letra hablan de que la situación en el Gobierno andaluz es "vergonzosa".  En cuanto a los cuplés, juegan con la dualidad del padre y los niños. en el primero piden un huevo Kinder y después dicen que van a jugar "con lo que le salga de los huevos". En el segundo dicen que los niños han pillado a los padres y remata con ironía sobre el tamaño del "tiburón" del padre. "Tenemos un truquito que da resultado. Lloramos, lloramos, lloramos. La última y nos vamos", reza el estribillo.  Popurrí al tipo con guiños constantes a esa dualidad entre el padre y el hijo.