Y el Martes Santo se rompió. Era una posibilidad que se barajaba durante toda la jornada. Pero al final, las previsiones meteorológicas se cumplieron, y desde las 20 horas la lluvia comenzó a mojar la ciudad, y, por supuesto, a las tres cofradías que se encontraban en la calle para realizar su estación de penitencia en la Catedral de Cádiz, Caído, Ecce-Homo y Columna.
A las 20 horas, comenzaron a aparecer las primeras gotas de lluvia, lo que obligó a las tres hermandades a cambiar su itinerario previsto.
La primera, la cofradía del Caído. El agua le sorprendió por la plaza del Palillero. La decisión más sabia en ese instante, acortar el recorrido, tomando la calle Valverde y Beato Diego de Cádiz para llegar a la iglesia de San Francisco pasadas las 21.30 horas.
La segunda, Ecce Homo. El primer aguacero ya le sorprendió en la plaza de la Catedral. La junta de gobierno, ante el cambio de la meteorología decidió no completar su recorrido y, una vez que llegase el cortejo a la calle Novena, entrar directamente a la iglesia de San Pablo. Sin embargo, eso no impidió que un fuerte aguacero, que cayó pasadas las 21.30 horas, mojase sobre todo el palio de la Virgen de las Angustias a su paso por la calle Montañés.
Ya solo quedaba la cofradía de Columna, que esperaba en Catedral que escampase. Había que irse para la parroquia de San Antonio. Pero el problema era en qué momento, porque a partir de las 22 horas los partes meteorológicos eran aún peores, como se anunció desde un principio.
La cofradía de Columna regreserá el Sábado Santo desde la Catedral, donde se ha quedado refugiada, a las 11 horas.
