Coro, tócame - semifinales

Tócala otra vez, pardo

El coro de Julio Pardo se presenta, bajo la mirada atenta de su autor en el palco de los antifaces, con un gran juego de voces de estos instrumentos que están deseando sonar una vez más. Una simpática presentación que sale de los cánones habituales del coro, que gusta más al público. El primer tango, a la mujer, que no es un instrumento que se puede tocar cuando uno quiera. No es un tambor que se pueda golpear, ni una guitarra a la que romper sus cuerdas. La mujer es libre, no le hace falta nadie para vivir y sentir. La mujer debe encontrar un músico que la mime y la cuide para siempre. El segundo tango es una crítica a la Iglesia, a la que le critica que no abre las puertas a los inmigrantes y a los necesitados, y sin embargo hablan de cómo José y María fueron acogidos en un pesebre para dar a luz a Jesús, que sólo tenía este techo. El primer cuplé sobre los fans de los componentes de las agrupaciones de Carnaval, que los esperan para hacerse una foto con ellos, mientras que a los coristas no les espera nadie. Y hablan que el cuartos de final hubo una cola para hacerse una foto con la chirigota de Los Impacientes, pero ellos ya estaban cruzando el Segundo Puente. El segundo cuplé, sobre los componentes del coro y el tipo, instrumentos de todo tipo de tienen muchos tamaños. Simpático el cuplé. El popurrí, bien interpretado, dentro del estilo del coro, pero con un giro más atractivo que conecta con el público.