Comparsa, los listos - preliminar

Ratones envenenaos de carnaval

Turno para la primera agrupación cabeza de serie del COAC 2020, la comparsa gaditana, Los Listos, con letra de Miguel Ángel García Argüez, el Chapa, y música de José Manuel Aranda y Manuel Sánchez Alba, el Noly. El pasado año concursaron como Los luceros. Se presentan como un grupo de roedores que salen de noche de su agujero, conscientes de que tienen una sola vida y están dispuestos a vivirla a tope. Dedican el primero de sus pasodobles a todas las cosas buenas que Cádiz les ha dado a ellos, siendo un ciudad tan pobre y que ellos a cambio tan solo le pueden ofrecer su pasodoble. El segundo dedicado a los carnavaleros que vienen de afuera de la ciudad, para los que piden respeto por el amor que tienen por esta fiesta, por mucho que los de aquí nos creamos con el derecho de proteger el legado de nuestros abuelos. En el primer cuplé cuentan lo que les pasó cuando fueron a por  diente de un niño y el Pacoli se cayó en el vaso de agua con la dentadura del abuelo. En el segundo cuenta su fervor por el Rocio, y de la que llevaban encima con varias copas de licor, en lugar de ellos saltar la reja, fue la Virgen la que saltó y cargó con ellos. Terminan su actuación con la interpretación del popurrí donde comienzan contando cómo es su vida en el país de los ratones. Aseguran que entre unos y otros siempre te la suelen dar con queso. Exponen la cantidad de trampas a las que estamos expuestos todos los días. Tienen la suerte de tener esta ciudad pequeña que no la cambian por nada. Finalizan entregando con sus coplas su pequeño corazón.          

Ratones envenenaos de carnaval

Turno para la primera agrupación cabeza de serie del COAC 2020, la comparsa gaditana, Los Listos, con letra de Miguel Ángel García Argüez, el Chapa, y música de José Manuel Aranda y Manuel Sánchez Alba, el Noly. El pasado año concursaron como Los luceros. Se presentan como un grupo de roedores que salen de noche de su agujero, conscientes de que tienen una sola vida y están dispuestos a vivirla a tope. Dedican el primero de sus pasodobles a todas las cosas buenas que Cádiz les ha dado a ellos, siendo un ciudad tan pobre y que ellos a cambio tan solo le pueden ofrecer su pasodoble. El segundo dedicado a los carnavaleros que vienen de afuera de la ciudad, para los que piden respeto por el amor que tienen por esta fiesta, por mucho que los de aquí nos creamos con el derecho de proteger el legado de nuestros abuelos. En el primer cuplé cuentan lo que les pasó cuando fueron a por  diente de un niño y el Pacoli se cayó en el vaso de agua con la dentadura del abuelo. En el segundo cuenta su fervor por el Rocio, y de la que llevaban encima con varias copas de licor, en lugar de ellos saltar la reja, fue la Virgen la que saltó y cargó con ellos. Terminan su actuación con la interpretación del popurrí donde comienzan contando cómo es su vida en el país de los ratones. Aseguran que entre unos y otros siempre te la suelen dar con queso. Exponen la cantidad de trampas a las que estamos expuestos todos los días. Tienen la suerte de tener esta ciudad pequeña que no la cambian por nada. Finalizan entregando con sus coplas su pequeño corazón.