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Los destripadores de la calle londres
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Desde la viña para destripar el concurso y algunas cosas más


La penúltima agrupación de la noche era también muy esperada tras su ausencia del Concurso durante dos años, el último grupo presentado fue Ángeles y malanges (Las dos caras de Cádiz) que llegó a cuartos en 2011, en los que su autor ha tenido suficiente tiempo para preparar concienzudamente su grupo. Los destripadores de la calle Londres, chirigota de Cádiz original de Manuel Santander Cahué, con la colaboración de Antonio Martín García, llegaba al escenario disfrazados de pescaderos del Mercado de Abastos. El público recibió al grupo viñero con fuertes aplausos. Los chirigoteros, tras la puesta en escena, hicieron la presentación que fue seguida por los espectadores con la esperanza de que se escucharan letras elaboradas con el puro sabor viñero de un autor que siempre ha estado en la pomada. Tras la presentación llegaron los pasodobles. El primero, magnífico y poniendo en pie al público, explicaba el autor su regreso al Falla y el segundo se convirtió en una crítica a la Justicia. Muchísimos aplausos para el grupo de chirigoteros. Después sonaron los dos cuplés, enchampelaos como mandan los cánones y el reglamento del Patronato, que hicieron las delicias de los espectadores. La letra del primero de ellos hablaba, de nuevo, de los nombres en las latas de Coca-Cola y la del segundo que también fue una crítica pero esta vez al Patronato y a las barbacoas de Kike Remolino. De nuevo aplausos para la agrupación. La actuación, muy conseguida por los copleros, fue del total agrado de los espectadores y de sus hinchas que, lógicamente, también los tiene. La chirigota se despidió con una larga ovación, correspondida por sus componentes, mientras se bajaba el telón para que se preparara la última agrupación. ¡Esto sí que es una chirigota!
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